Luego de un primer tiempo aburrido los guapileños se dedicaron a jugar en la complementaria mientras que los brumosos echados atrás en busca del contragolpe esperaban el pitazo final, ya que no podían arriesgar como si lo hacen en suelo brumoso.
Los guapileños se fueron con todo con su principal figura Eneas Da Conceicao este fue un dolor de cabeza para la cabaña brumosa durante los 100 minutos.
Pero al minuto 66 el joven Leonardo Madrigal puso a festejar a los aficionados brumosos que estaban tanto dentro como fuera de Ébal Rodríguez cuando luego de un trallazo del artillero Mainor Días que dio en el palo madrigal tomo el rebote y le gano el viaje al arquero santista Pablo Camacho y la metió en la redes guapileñas.
El equipo guapileño echo todo por el todo no tenían nada que perder y encimaron al los brumosos y como dice el dicho “tanto va el cántaro al agua hasta que se rompe” y al minuto 76 el portero cartaginés salio a cazar mariposas y este error fue aprovechado por conceicao para romper el cerrojo defensivo de los brumosos y devolverle la tranquilidad a la afición guapileña.
Los corazones guapileños dejaron de latir por unos instantes cuando al minuto 88 el arbitro central Mario Arturo Barrantes señalo un penal a favor de los brumosos pero la angustia llego porque al no estar Mainor Días no había quien lo tirara y el jugador Alexander Calvo le pidió la confianza a su técnico el cual se persinaba cada segundo antes que se lanzara. Pero las ascias de comieron al brumoso y lo pego en el travesaño.
“YO SE LO PEDÍ AL PROFESOR EL ME DIO
Con un estadio a reventar, dos manchas bien definidas la roja y blanca y la blanquiazul tanto dentro como fuera del estadio cada una esperando el final de un partido que se jugaba con alma y corazón por parte de ambos cuadros.
El calor del Atlántico no impidió que cinco buses salieran a eso de la 6:00 de la mañana del parque central de Cartago rumbo al Ébal Rodríguez para corear “vive, vive Cartago vive”
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